De aquellos imprescindibles que refiriera Bertolt Brecht, catalogaron a los intelectuales Adys Cupull y Froilán González en El autor y su obra, espacio mensual del Instituto Cubano del Libro en la Biblioteca Nacional «José Martí», dedicado en la edición de junio a estos valiosos investigadores.

Estos dos estudiosos del Che, Mella, Martí, Mariana Grajales y otras tantas figuras de la historia, son verdaderos hacedores del calificativo brechtiano: aquellos que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles, como esta pareja en la profesión y el amor lo han demostrado a lo largo de los años.

Han resuelto, desentrañado y relevado al mundo sucesos, enigmas, olvidos y personajes de la historia, llevados al lugar que merecen luego de un riguroso trabajo científico de búsqueda y cotejo de información, como quedó constatado. Los testimonios de José Andrés Pérez Quintana, director del Museo de la Revolución y Olivia Diago Izquierdo, editora de la Casa Editorial Verde Olivo, así lo evidenciaron.

Uno de esos sucesos por ellos descubiertos luego de ardua labor investigativa, fueron los 38 días perdidos en la ruta de José Martí y Carmen Zayas Bazán por Centroamérica cuando, después del Pacto del Zanjón, regresaron a Cuba.

No solo la investigación ha atesorado su quehacer profesional, válido también su accionar museístico en la recopilación de objetos vinculados al Che, tales como la camilla donde fuera trasladado su cadáver. Suman una indulgente labor comunitaria en la trasmisión del conocimiento sobre el Guerrillero Heroico y otras figuras desde su hogar, sede del proyecto Galería 14 de junio, en Centro Habana.

Su producción editorial destaca con más de treinta libros, algunos de ellos imprescindibles en el conocimiento sobre Ernesto Guevara. Tal es el caso De Ñancahuasú a La Higuera, volumen que donaron para la ocasión a la Biblioteca Nacional.

También el realizador audiovisual italiano Walter Uliano Pisteli hizo donación de copias de su documental Che Guevara en el siglo XXI —estreno mundial realizado en Cuba el pasado 16 de junio— a los homenajeados y a la institución bibliotecaria.

Varias anécdotas sobre sus trabajos acompañaron la velada a la que asistieron familiares, amigos, investigadores y público en general. (Por Ernesto Cuní/Cubarte)(Fotos:@Juan C Borjas)

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